Un hombre salía de una reunión un poco ebrio, no tanto como
para no llegar sólo a su casa, subió al bus que lo dejaría cerca a su domicilio
el bus estaba medio vacío pues era muy tarde.
A unos cuantos paraderos subió un hombre vestido de negro
con una capucha la cual le cubría el rostro, camino hasta el último asiento del
bus y se sentó, el bus siguió su ruta como todas las noches y poco a poco los
pasajeros iban bajando en sus destinos.
El hombre que se había quedado dormido despertó varios
paraderos adelante y apurado pidió bajar del bus, el cual se detuvo y el hombre
bajó, ya era muy tarde y las calles estaban vacías, oscuras y propicias para
ser víctima de un robo o algo peor y para colmo de males no pasaba ni un bus
para regresar, entonces decidió caminar cuando de pronto oyó una voz que le
dijo: Ud. también se ha quedado dormido, me he pasado, podemos regresar juntos
pues es peligroso caminar por estos lares.
El hombre al voltear para ver de quién era la voz se llevó
con la sorpresa de que era el tipo de la capucha que subió unos paraderos
después, y aceptó la compañía pero con
la oscuridad y la capucha no podía verle bien el rostro, decidió caminar a su
lado y ambos caminaban platicando.
Más adelante sintieron la presencia de dos tipos que se les
acercaban tal vez con malas intenciones, el tipo de la capucha dijo: siga
caminando y no voltee seguro que se irán. El hombre no volteo pero caminaba
atento por si algo pasaba, pero de pronto los sujetos retrocedieron y se fueron
por donde vinieron.
El hombre se asombró y se quedó con la incertidumbre de por
qué se fueron pero no le dio mucha importancia y siguieron caminando y
platicando y así por un buen rato.
Luego de caminar un buen rato, el hombre le la capucha le
dice al otro: bueno aquí nos separamos. El hombre se sorprendió pues como sabía
que ahí se separaban si no le había dicho por dónde vivía,
pero lo dejo pasar y
responde si yo voy para allá y gracias por la compañía. Para despedirse lo mira
fijamente y no logra verle el rostro ya no solo por la capucha y la oscuridad
pues no tenía rostro solo veía oscuridad en el rostro. Pero decidió no hacer
nada que pudiera molestar al sujeto y estiro la mano para despedirse, el otro
sujeto también la estiro pero el hombre noto que el hombre le estiro para
sujetarla era una mano de esqueleto, nada de piel solo hueso.
El hombre al ver esa mano lo único que hizo fue correr en dirección
a su casa y oyó una voz que le decía “cuando quiera le acompañare” el hombre no
hizo caso ni volteo solo corrió si detenerse hasta llegar a su casa. En su casa
asustada le platica a su mujer lo sucedido pero ella como no noto un poco
mareado no le creyó.
Unos días después en las noticias se enteró que una persona había
sido asesinada en el mismo lugar en donde camino con el encapuchado y al ver
las imágenes de la noticia, noto que la víctima tenia las mismas ropas que el
encapuchado que lo acompaño aquella noche…
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